Introducción.- Dodona era un
lugar donde se realizaban oráculos, estaba situado en Tesprotia región
montañosa al norte de Grecia, se encontraba en el interior de un bosque, en la falda del monte Tomaros, con una fuente cercana al río Aqueloo y un árbol
sagrado. Fue creciendo en importancia y por ello se creó un santuario, un lugar liminar junto al agua, una fuente. Los sacerdotes
y sacerdotisas del bosque sagrado interpretaban los sonidos reverberantes de
los calderos, el susurro de las hojas del roble con el viento y el vuelo de las
palomas.
Hemos recogido información sobre
Dodona de diferentes fuentes que afirman que en aquel lugar del norte de Grecia
se producían oráculos junto a un roble o encina sagrada que albergaba la virtud
de hacer presagios, es posible que se trate de un roble aunque hay autores que hablan de encina. Diferentes literatos griegos y romanos han hablado de
Dodona: Heródoto, Homero Iliada canto 16 (233) Odisea canto 19 (296),
Sófocles, Esquilo, Plutarco, Estrabón, 7, frag. 3.
"Zeus soberano, Dodoneo, Pelásgico, que vives lejos y reinas en Dodona, de frío invierno, donde moran lo selos, tus intérpretes, que no se lavan los pies y duermen en el suelo!" Iliada canto 16 (233)
"Zeus soberano, Dodoneo, Pelásgico, que vives lejos y reinas en Dodona, de frío invierno, donde moran lo selos, tus intérpretes, que no se lavan los pies y duermen en el suelo!" Iliada canto 16 (233)
Encina: Fuente del Berro |
Historia:-
La historia de Dodona comienza en
la Edad del Bronce y termina en la era cristiana, al ser tan antiguo su origen el lugar
estaba dedicado a la Diosa madre pasando después al poder de Zeus. El culto al dios celeste llegó a Dodona en el siglo
VIII para convivir con una creencia en una diosa Tierra ligada al culto a la
encina. Zeus extiende sus oráculos por toda la geografía griega, pero los dos
más importantes fueron: Dodona en el salvaje norte
y Siwa en el desierto libio. Ambos son lugares extremos y de difícil
acceso. Los oráculos de Zeus están vinculados a Egipto. Hay un pasaje de
Heródoto que cuenta el origen mitológico o legendario de Dodona a partir de los
pelasgos.
En principio por tanto el
santuario era un recinto sin edificios, al aire libre, delimitado por un cerco
y marcado por unos calderos que servían como instrumentos para la adivinación
por suertes. El santuario ha sido excavado por
la Sociedad Arqueológica de Atenas por la que se ha averiguado cómo era el
recinto: entrada principal al este con un templo dórico dedicado a Heracles, a
continuación dos templetes jónicos dedicados a Dione y hacia el oeste el templo dedicado a Zeus, la “Morada
sagrada”, y junto a este se levantaba la encina sagrada de Zeus donde se realizaba el ritual adivinatorio de Dodona. La encina sagrada fue respetada
por los romanos, pero el fin del oráculo se produjo bajo el emperador Teodosio cuando
se tala la encina en el año 391.
Roble Fuente del Berro. Madrid |
Cómo era el oráculo de Dodona.-
La gente peregrinaba a Dodona
para obtener respuestas a sus preguntas acerca del futuro. Las consultas eran relativas a la toma de decisiones religiosas o políticas, consejos para la vida del día a día y para asuntos de la salud. Los oráculos de Zeus
son muy antiguos, estos se caracterizan por sus extraños medios de adivinación, en Dodona a través de un árbol sagrado y en Siwa a través de una estatua
de madera. El conjunto de señales que se interpretaban era muy variado: se profetizaba a través de los murmullos de las hojas de la encina
sagrada y del vuelo de las aves. Igualmente se profetizaba a través del gorjeo
de las aguas de una fuente vecina y de la que había en unos calderos de bronce.
Los intérpretes de los signos o
señales son los sacerdotes llamados selloi (que van descalzos y que duermen en
el suelo en contacto con la tierra). También se habla de sacerdotisas o Peliades
(palomas) como las del mito fundacional. La adivinación se alcanza por
distintos medios de inspiración divina a través del elemento telúrico o con el
celeste (vuelo de las palomas).
Kálathos del árbol de la vida. MAN Madrid |
Algunas explicaciones de los poderes de la naturaleza.-
Frazer comenta que en
Dodona hay una fuente al pie de un gran árbol cuyos murmullos son interpretados
por la sacerdotisa de los oráculos. Entre los griegos una salida de agua de
ciertas fuentes sagradas o pozos se supone le confiere proféticos poderes
(Frazer, 1978: 194). También dice que el culto al roble o al dios del roble
aparece compartido por todas las ramas del conjunto ario en Europa,
griegos e italianos asocian el árbol con su dios más importante, Zeus y
Júpiter. Quizás el más antiguo y más famoso santuario de Grecia fue Dodona,
donde Zeus era reverenciado en el roble oracular. Se decía que en Dodona había
más tormentas que en cualquier parte de Europa por eso se hizo una casa para el
dios cuya voz era oída en el susurro de las hojas del roble y en el estampido
de los truenos. Quizás el gong de bronce colgado alrededor del santuario movido
por el viento que los hacía sonar era un mimetismo semejante al sonido de los
truenos en las montañas (Frazer, 1978: 209-210).
Y Plinio hablando de los
poderes o virtudes de las aguas dice que las aguas producen presagios… En el Libro
XXXVI, 91-92, citando a Varrón habla de un laberinto o monumento cuadrado
sobre el que “se yerguen cinco pirámides, rematadas todas en el vértice con un
disco de bronce y una única cúpula que las cubre a todas, de la que cuelgan
campanillas sujetas por cadenas cuando las mueve el viento su tintineo se oye
desde lejos”, y añade:”como sucedía en Dodona”.
Plinio en su libro XXXI
escribe sobre el poder de las aguas: es un poder asombroso, brotan
abundantemente por todas partes, las termales sirven de remedio para las
enfermedades y dan origen a ciudades. Pero todas tanto las frías como las
calientes curan enfermedades. XXXI, 23 Las aguas producen grandes prodigios,
como los presagios, en Cantabria las fuentes se consideran portadoras de
presagio. Las fuentes Tamaris son tres y se reúnen en un único cauce formando
un extenso río.
Debido a este poder que goza el
agua se le ha dado culto y en algunos
casos su virtud oracular ha dado lugar a antiguos santuarios: fuente oracular
de Dodona que fluía en las raíces del sagrado roble y sus murmullos son
interpretados por la sacerdotisa de los oráculos.
En esta línea de creencias G.S.
Kirk afirma que los griegos creían en las cualidades sobrehumanas de la
propia naturaleza. Sabiduría de los pájaros, encina profética de Dodona y los
signos de los cielos. (Kirk, 1973: 192)
El fin de estos oráculos tiene lugar con la difusión del cristianismo y la imposición del monoteísmo frente
al culto a la naturaleza y la creencia en sus poderes y sus dioses, en las
religiones del libro el espíritu de profecía de los profetas viene de Dios mientras
en los oráculos el poder de adivinación recae en la naturaleza aunque también
se necesite de los dioses. Bibliografía:
Kirk, G.S., El mito: su significado y funciones en las distintas culturas, Barcelona, 1973
Frazer, J.G., The Golden Bough, London, 1978
Hernández de la Fuente, David, Oráculos griegos, Madrid, 2008
Plinio el Viejo, Lapidario, Madrid, 1993
Plinio el Viejo, Historia natural, Madrid, 2007