Para Cirlot la sirena:" es una
figura simbólica que aparece bajo dos aspectos principales, como mujer-pájaro o
como mujer-pez” (1982: 415). Habitaban lugares escarpados y entonaban cantos
dulcísimos con los que atraían a los caminantes para devorarlos. Después
aparecieron las sirenas de cola de pez habitantes de las islas rocosas que se
comportaban como sus hermanas aves. El mito de la sirena es uno de los más
persistentes y a través del folklore ha llegado hasta nuestros días. Representa
lo femenino, la tentación, el deseo, la sirena de doble cola puede ser Géminis,
o actitud clásica de adoración como las figurillas cretenses. Wirth la
considera como símbolo de la mujer terrestre en oposición al hombre el cielo.
El poder lo ejercen a través de la magia porque aturde a quien la oye.
Herrero Marcos afirma que el
híbrido de mujer con cola de pez es en realidad una nereida. Las llamadas
sirenas en realidad son aves, eran tres hermanas que fueron convertidas en aves
por la diosa Ceres por no haber socorrido a Proserpina cuando fue raptada por
Plutón. Su origen es el mundo oriental y la mitología grecorromana. Fueron
relacionadas con los espíritus de los muertos y en oriente como imágenes aladas
de las almas.
Parece que llamamos sirenas a
diferentes seres del imaginario que nos ha llegado a través de la cultura
griega, la Odisea tiene un capítulo dedicado a ellas cuando Ulises es
advertido por Circe para que procure no hacer caso de los cantos de las
sirenas. La iconografía griega nos ha sido transmitida como en otras ocasiones
a través de los vasos de cerámica.
Hades. MAN |
San Vicente. Ávila |
Capitel. San Vicente de Ávila |
Sto. Tomé, portada sur. Ávila |
La cultura cristiana da una
interpretación moral a las antiguas mitologías por eso se habla de sirenas y
nereidas como seres maléficos en bestiarios y en enciclopedias medievales y
renacentistas. De una antología de textos relativos a bestiarios medievales editada
por Siruela entresacamos textos que hablan sobre las sirenas y encontramos
afirmaciones como esta del Fisiólogo armenio, 126-127: “El moralista
enseña que las sirenas son crueles; que viven en el mar, que los acentos de sus
voces son melodiosos, y que los viajeros quedan prendados de ellas hasta el
punto de precipitarse en el mar, donde se pierden. El cuerpo de estas
encantadoras es el de una mujer, hasta los senos; el resto recuerda al pájaro,
al asno o al toro” (Malaxeverría, 1986:132). Y luego
comenta que estas son semejantes a los que tienen dos modos de parecer, los
inconstantes. Hay otro bestiario Liber monstrorum de diversis generibus,
42-43 en el que ya aparece la sirena-pez: “Las sirenas son doncellas marinas,
que seducen a los navegantes con su espléndida figura y con la dulzura de su
canto. Desde la cabeza hasta el ombligo, tienen cuerpo femenino, y son
idénticas al género humano; pero tienen las colas escamosas de los peces, con
las que siempre se mueven en las profundidades” (Malaxeverría, 1986:133). E
incluso se las compara con el demonio en el bestiario de Guillaume le Clerc GC,vv.
1053-1112: “Tanto nos demoramos en los placeres, que por fuerza nos dormimos.
Entonces nos mata la sirena: es el Demonio, que nos lleva al mal, que nos hace
sumergirnos tan hondo en los vicios, que nos encierra en sus redes” (Malaxeverría,
1986: 135).
San Cipriano. Zamora |
Museo Marés. Barcelona |
Como otros personajes simbólicos, de orígenes inciertos de muy largo recorrido, la imagen de la sirena evoluciona y se difunde desde sus orígenes mitológicos hasta formar parte del folklore.
También hemos encontrado una sirena o sirénido con aspecto masculino:
También hemos encontrado una sirena o sirénido con aspecto masculino:
Capitel de la iglesia del Monasterio de Aguilar de Campoo. MAN. |
Bibliografía
Alarcón Román, Concepción, Catálogo
de amuletos del Museo del Pueblo Español, Madrid, 1987
Baroja Nessi, Carmen, Catálogo
de la colección de amuletos, Madrid, 1945
Cirlot, J.E., Diccionario de símbolos, Barcelona, 1982
Elworthy, F.T. The Evil Eye, Londres, 1895
Cirlot, J.E., Diccionario de símbolos, Barcelona, 1982
Elworthy, F.T. The Evil Eye, Londres, 1895
Herrero Marcos, Jesús, Bestiario
románico en España, Palencia, 2010
Hildburgh, W.L., “Notes on
Spanish amulets”, Folklore, XVII, 1906, 462
Malaxeverría, Ignacio, Bestiario
medieval, Madrid, Siruela, 1986
Yarza Luaces, Joaquín, Formas
artísticas de lo imaginario, Barcelona, 1987