martes, 22 de diciembre de 2015

SOLSTICIO DE INVIERNO: NAVIDAD

En el final del imperio romano las influencias religiosas de Oriente habían minado la vida romana, la extensión del culto a la diosa Madre y el culto a Mitra por el imperio son dos buenos ejemplos de esta situación. Las nuevas religiones inocularon a los latinos una manera diferente de ver el mundo en pos de ideales poco terrenales, dando mayor importancia a la vida futura. Entre los dioses de entonces llegados al mundo occidental destaca  Mitra cuyo culto parece tener puntos de semejanza con el cristianismo. 
 La religión de Mitra fue una potente rival del cristianismo, una reliquia de la larga lucha se preserva en la fiesta de Navidad, que la iglesia parece haber tomado de los cultos mitraicos persas. En el calendario juliano el 25 de diciembre es reconocido como el solsticio de invierno y es  considerado la natividad del sol, porque es el momento del turning-point, es decir el momento  en el que el poder del sol crece o empieza a renacer. Lo que hicieron los cristianos fue hacer coincidir el ciclo litúrgico con el ciclo solar, así la Natividad de Cristo  se solapa con el renacimiento del sol. Las fiestas navideñas son fiestas  de luz por eso se fijaron en el solsticio de invierno. "Toda la liturgia del Adviento canta a esa Luz que se acerca y que poco a poco hiende las tinieblas" (Hani, 1983: 134). En el solsticio hay una correspondencia entre el sentido místico y el cósmico, primavera de la naturaleza y de las almas.

En Siria y Egipto es donde primero se comenzó a festejar  el nacimiento de Jesús por estas fechas. Los evangelios nada decían de la fecha del nacimiento de Jesús y por esta razón la Iglesia no lo celebraba al principio, pero los cristianos de Egipto celebraban la Navidad el 6 de enero y esta celebración fue extendiéndose por Oriente hasta el siglo IV, pero la Iglesia Occidental adoptó el 25 de diciembre y esto fue admitido por toda la cristiandad. Esa fecha fue tomada porque los paganos celebraban el nacimiento del sol en ese día y acudía mucha gente a las festividades, entre ellos los cristianos, haciendo luminarias como símbolo de la fiesta, y decidieron que se debía celebrar la Natividad en ese momento y el 6 de enero sería la Epifanía. Adoptándose las antiguas costumbres que se han transmitido hasta nosotros en las velas que se ponen en el árbol y en el "leño de Navidad".

Plaza de Colón. Madrid

Las fiestas del fuego en Europa.-
Para Frazer la Navidad entra dentro de las fiestas del fuego en Europa y aunque las hogueras son más propias de la primavera y el verano, también se hacían en otoño e invierno (para Navidad, Epifanía y Todos los Santos).
Qué nos queda de los antiguos símbolos festivos: queda el árbol de Navidad encendido con luces o velas y el leño de Pascua. El árbol de Navidad es más propio de países del norte y del centro de Europa. Según un artículo que leí hace unos días el primer árbol de Navidad que se puso en España lo puso una princesa rusa  en Madrid en 1870, en Internet:
Los fuegos del solsticio invernal sobrevivieron en el leño de Pascua, así ocurría en Inglaterra (Frazer, 1978: 833) y en el Pirineo español (Violant i Simorra), aunque era propio de toda Europa, están más documentadas las festividades de Inglaterra, Francia y los eslavos meridionales. Esta era una fiesta casera, de puertas para adentro en contraposición de las que se celebran en primavera y verano. Es creencia extendida que los restos de este tronco sirven contra los rayos, evitan los fuegos y hacen huir al demonio. En Inglaterra además del leño se encendían cirios de Pascua de un gran tamaño, así se iluminaba la casa y parecía de día.
Belén en la iglesia de san Ignacio.
Torrelodones

Violant i Simorra habla del tizón o leño de Navidad y dice más, en el País Vasco llaman Olentzero a la Nochebuena, así como a un tronco que arde en el hogar de las casas durante las fiestas navideñas, también en la montaña de Navarra se pone al fuego un tronco el día de Nochebuena y se practican ritos parecidos a los de la zona provenzal y en la zona catalana del Pirineo toma un sentido más de regocijo infantil y familiar, se le llama de diversas maneras y la llamada tronca de Nadal se rellena una vez agujereada de turrones, orejones, higos secos y golosinas, para que después los niños lo golpeen y caigan los dulces… Un amigo mío, nacido en la Pobla de Segur, me contaba que esta tradición de la tronca de Nadal rellenada de dulces y juguetes la vivió de pequeño, no tan lejos en el tiempo.
Bibliografía
Frazer, J.G., The golden bough, Great Britain, Suffolk, 1978
Hani, Jean, El simbolismo del templo cristiano, Barcelona, 1983
Violant i Simorra, Ramón, El Pirineo español, vol. II, Barcelona, 1986

lunes, 7 de diciembre de 2015

LA INMACULADA CONCEPCIÓN: SU ICONOGRAFÍA

El culto y la fiesta a la Inmaculada son muy antiguos se remontan al siglo VIII y provienen de oriente llegando a Europa a través de los bizantinos. La creencia de que María fue libre de pecado desde el primer instante de su concepción va ganando adeptos a través del tiempo, pero no toda la Iglesia admitía esta idea  sino que siempre hubo varias posturas a favor o en contra de la doctrina inmaculista, fueron los franciscanos desde el comienzo sus más firmes defensores en el siglo XIV enfrentándose a los dominicos, posteriormente los jesuitas se sumaron a esta creencia .
Manuel Trens se pregunta cómo se representó primitivamente a la Virgen sin pecado original y cómo evolucionó hasta llegar a la Inmaculada. Nosotros vamos a narrar esquemáticamente el desenvolvimiento de esta trayectoria.
La iconografía de la Inmaculada se inspira en la mujer apocalíptica de San Juan: “Una Mujer, vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza…” y sus primeras representaciones nos llevan a los Beatos en las que observamos a esta mujer que se enfrenta al dragón infernal con la ayuda de san Miguel, los elementos de esta iconografía son: el sol, la luna y las estrellas. Pero esta mujer no es la que directamente influye en la imagen de la Inmaculada porque las representaciones marianas de la Inmaculada van a evolucionar a partir de diferentes ideas que se materializarán en diferentes representaciones. En primer lugar, la Virgen Inmaculada se va a representar  de una manera descriptiva y genealógica, y su mejor ejemplo es al árbol de Jesé, en Internet: http://calarc.blogspot.com.es/2015/04/origenes-del-arbol-de-jese.html. El abad Suger es pionero en la utilización de este árbol genealógico en los siglos XI-XII, pero ya existía en miniaturas las genealogías en Biblias y beatos. Algunas catedrales como la de Toledo, Salamanca o Burgos tienen este árbol en capillas y retablos o en el coro de la catedral de León. Además del árbol de Jesé existen otras representaciones de la parentela de María que hablan de su condición sin mácula y son: el encuentro de san Joaquín y santa Ana, santa Ana triple, la Virgen niña o la leyenda del unicornio.
Medalla de la Inmaculada.
Leyenda reverso:
GUARDIA DE HONOR DE MARÍA EN S. ESTEBAN DE VALENCIA

La Virgen Tota pulchra es el siguiente paso que vamos a considerar en la representación de la Inmaculada, en él se dejan de representar los personajes históricos, así como las fábulas y leyendas, apareciendo en su lugar la Virgen sola rodeada de inscripciones, emblemas y alegorías. Los antecedentes de esta iconografía son las mariologías, bien en composiciones literarias o plásticas. Los temas de estas mariologías son: 1º Tipos del Antiguo Testamento. 2º Cuatro símbolos animalistas más corrientes. 3º Fábulas. Un ejemplo importante es el de María rodeada de emblemas y coronada por la Trinidad de Juan de Juanes, pintura del Colegio del Sagrado Corazón de Jesús de Valencia. Aunque los títulos de honor que le atribuyen a María son obra de sor Isabel de Villena, la visión la tuvo Martín Alberro, y será Juan de Juanes el que traslade a la pintura la imagen ideal de esta Inmaculada.
Donación de Plácido Arango. Museo del Prado.
Zurbarán

También la escultura se verá teñida de estas imágenes de María más abstractas, los emblemas de María se representarán en el retablo del altar mayor de la iglesia de Medina-Sidonia de Cádiz o en el tímpano del portal mayor de la catedral de Palma. Los grabados por otro lado muestran tanto la letanía gráfica como el dragón apocalíptico o la Virgen en actitud belicosa clavando la lanza al dragón.
Tota pulchra convento de san Antonio de Padua. Toledo
Inmaculada Tota pulchra en la tienda del convento
de san Antonio de Toledo

Definitiva imagen de la Inmaculada.-
Mientras los teólogos argumentan sobre el misterio de la Inmaculada Concepción, la liturgia exterioriza esas ideas mediante solemnidades y textos litúrgicos y los artistas recogen ese bagaje plasmando las especulaciones abstractas. María pasa de ser un símbolo a presentarse en éxtasis, este paso de la Virgen preexistente a la personificación de la Virgen sin mancilla en éxtasis ocurre a lo largo de la Edad Moderna. Es a finales del siglo XVI cuando en España se fija el tipo de la Inmaculada, su formulación teológica se realiza en Trento donde se dice que María es perpetuamente sine macula. Y cómo se da plasticidad a esta idea de la mujer preexistente del Apocalipsis anterior a la maternidad divina: es una virgen sin niño, orante, con las manos juntas sobre el pecho, con aureola solar, 12 estrellas en la cabeza y la luna a sus pies. España llevará la batuta para conseguir una definición dogmática en Roma de la Inmaculada Concepción de María en los siglos XVII y XVIII, pero no será hasta 1854 que se consiga. 
En el siglo XVII la Virgen pierde su carácter apocalíptico y acentúa su aspecto de nueva Eva. El dragón se convierte en serpiente. Pedro Fourrier (+1640) apóstol de Lorena distribuye medallas en las que la serpiente está más debajo de los pies de la Virgen, estrujando la bola del mundo. Es la imagen que Santa Catalina de Labouré (1830) vio impresa en la famosa medalla milagrosa.
Foto de Concha Alarcón
La medalla milagrosa de la Inmaculada.
Iglesia de san Ignacio. Roma


También hay representaciones guerreras de la Inmaculada hendiendo la cabeza de la serpiente y otra variante con su hijo en brazos, siendo él el que mata la sierpe. Pero la imagen que conservamos en nuestra memoria es la de la Virgen apoteósica y triunfante entre un torbellino de luz y ángeles que pintó Murillo y que ha llegado hasta nosotros no solo en su original sino a través de una variedad de copias en estampas y medallas.
Medallas de la Inmaculada:
plata y esmalte

Bibliografía.-
García Mahíques, Rafael, Perfiles iconográficos de la mujer del Apocalipsis como símbolo mariano, Ars longa, 1996-1997, 177-184
Mestre Sanchís, Antonio (dir.), La Iglesia en la España de los siglos XVII y XVIII, Madrid, BAC, 1979
Trens, Manuel, María. Iconografía de la Virgen en el arte español, Madrid, 1946

miércoles, 11 de noviembre de 2015

SAN MARTÍN DE TOURS

San Martín fue nombrado obispo de Tours en el 371 y en los alrededores de esa ciudad fundó el monasterio de Marmoutier, es uno de los primeros santos que se venera en la liturgia sin haber sido martirizado, pero fue un activo evangelizador con poderes taumatúrgicos. Desde el principio se le reconocieron curaciones milagrosas.  En los siglos VI y VII la devoción popular se centraba en las reliquias de los santos como el caso de la devoción a de san Martín en Galicia (Christian, 1976: 50).
Tímpano de la capilla de san Martín.
Aljafería, Zaragoza

El culto a san Martín de Tours  penetró en España por el camino de Santiago, en el siglo X ya contaba el santo con algún santuario. En el Códice Calixtino se considera a san Martín entre los cuerpos santos que ha de ir a visitar el peregrino del Camino de Santiago, cuya tumba de oro, plata y piedras preciosas refulge; es además especialmente apreciado por sus milagros con endemoniados, leprosos, energúmenos, erráticos, lunáticos, etc.“Situado en un lugar privilegiado de la 4ª ruta francesa del Camino de Santiago, la turonense, se difundió su culto de una manera muy intensa a lo largo del Camino de Santiago en territorio español. Las más antiguas iglesias románicas españolas, a partir del s. XII, de una ancha franja  a lo largo del Camino de Santiago, están bajo la advocación de san Martín” (Bravo Lozano, 1989: nota 149). Existe también una cueva de san Martín en Alcudia (Mallorca) donde hubo una capilla dedicada al santo, se supone que fue lugar de reunión en los primeros siglos del cristianismo.
San Pedro de Zuera. Tabla de San Martín de Tours
MAN. Madrid

Gregorio Turonense escribió libros como la Historia de los francos y los Libros de milagros en los que habla de los santos como san Martín y de: “las pruebas que dan fe del poder curativo y de otros poderes de las tumbas y reliquias” (Freedberg, 1992:159) los poderes se encuentran no solo en las reliquias sino en todo lo que ha estado en contacto con ellas; Gregorio es además un gran difusor de su culto en España a través de la obra De miraculis sancti Martini en la que cuenta que un rey suevo de Gallecia que tenía a su hijo enfermo mandó una embajada a Tours con oro  y plata igual al peso del niño para conseguir su curación. Como no consiguió su propósito decidió dejar el arrianismo y construir una basílica a san Martín y prometió bautizarse si obtenía una reliquia del santo. Una nueva embajada depositó un manto de seda sobre la tumba de san Martín y al sentir que se hacía pesado supusieron que ya tenía la virtud del santo se lo llevaron al hijo del rey quien curó y se convirtieron al catolicismo. Pronto se crearon monasterios en su nombre. Carmen Rodríguez considera que hubo también otras dos vías orientales de penetración del culto, una dejó una iglesia en la zona entre Cartagena y Sagunto y la otra en los Pirineos a mediados del siglo VI donde había un monasterio dedicado a san Martín.
Iglesia de san Martín Sallamanca
Iglesia de san Martín. Salamanca

No sólo literatura piadosa alrededor de Martín es importante, también multitud de iglesias a él dedicadas (san Martín de Frómista es un ejemplo señalado) y arte en torno a su figura nos muestran la popularidad de su devoción. La iconografía de san Martín puede dividirse en dos etapas: 1ª la de soldado que parte su capa, y 2ª la del obispo sanador de enfermos. En general resulta popular porque su vida fue ampliamente difundida tanto por Gregorio de Tours como por La leyenda dorada, apareciendo desde el siglo VI en los mosaicos de san Apolinar de Ravena y en otros muchos lugares. La imagen que más conocemos de san Martín es la del soldado compartiendo su capa escena que ocurrió en Amiens cuando Martín comparte su capa con un mendigo: http://algunsgoigs.blogspot.com.es/2015/12/goigs-sant-marti-sant-marti-de-surroca.html, pero existen otras muchas como la miniatura de un manuscrito del emperador búlgaro Basilio II en la que aparece san Martín resucitando un muerto.
Relieve de san Martín.
Segovia

La fiesta de san Martín fue importante por otras razones, como lo documenta Bruegel en un cuadro que adquirió el Museo del Prado en 2010, titulado El vino de la fiesta de San Martín, que trata de la distribución del primer vino de forma gratuita entre el pueblo, es una especie de bacanal alrededor de un inmenso tonel rojo. En este cuadro aparece san Martín ejerciendo la caridad con dos tullidos:
https://www.museodelprado.es/coleccion/obra-de-arte/el-vino-de-la-fiesta-de-san-martin/e6d44e39-77fb-4deb-a5ed-0a99fbe76847
Bibliografía
Christian, W., “De los santos a María”, en Temas de Antropología Española, Madrid: Akal, 1976
Freedberg, David, El poder de las imágenes, Madrid: Cátedra, 1992
Guía del peregrino medieval (Codex Calixtinus). Introducción, traducción y notas por Millán Bravo Lozano, Sahagún, 1989
Monreal y Tejada, Luis, Iconografía del cristianismo, Barcelona: Acantilado, 2000
Santos sanadores, Barcelona: editado por Ciba S.A. de Productos Químicos, 1948
Gozos a san Martín en Internet, blog de Josep Maria Viñolas Esteva: 
http://algunsgoigs.blogspot.com.es/2015/07/la-devocio-sant-marti-traves-dels-goigs.html
https://algunsgoigs.blogspot.com.es/2017/04/goigs-sant-marti-dosquers-maia-de.html

sábado, 24 de octubre de 2015

EL RETRATO DE SAN IGNACIO

San Ignacio entra dentro de la tipología de santos caballerescos porque pertenecía a la clase de los caballeros y fue además soldado. Probablemente ya durante su vida se le pedía ayuda en las enfermedades graves y en los peligros corporales. De hecho él soportó pacientemente los dolores que le proporcionaron heridas y enfermedades, además trabajó en un hospital. Su proceso de canonización surgió tras la curación de diferentes personas, siendo  venerado no solo por los enfermos en general sino también porque se le invoca en las enfermedades mentales, en la lucha contra las influencias demoníacas,  en el embarazo y por los enfermos con fiebres. Dos remedios populares asociados al santo son el agua (Muñoz, 1956) y el aceite de san Ignacio, para la preparación del agua hay un ritual romano y el aceite usado era el que se recogía de las lámparas que han ardido consagradas a él, por otro lado está el caso de la Ignatia amara  o haba de san Ignacio que proviene de un árbol originario de la India, China y Filipinas y que era usada para la fiebre. 
Imagen de san Ignacio en la fachada del Gesú.
Roma


San Ignacio se caracteriza por su carisma, según García Hernán no estuvo dotado ni física ni intelectualmente, ya que no gozó de buena salud y tampoco fue un estudioso importante, eso sí, sus Ejercicios Espirituales conocieron muchas ediciones y fueron traducidos en muchas lenguas por todo el mundo. Cómo es posible que una persona de estas características creara una Orden religiosa como la Compañía de Jesús. Sus biógrafos hablan de ejemplaridad en todas las facetas de su vida, también hablan de su capacidad de autodefinición y de su capacidad de hacer congeniar lo contemplativo con lo activo. Es alabado por haber encontrado una vía media tanto a nivel religioso como en la vida civil, y tanto en el plano científico como en el antropológico o espiritual. "Era en cierto modo seguir siendo alumbrado y erasmista, a la vez que romano y jerárquico, tuvo el acierto de saber conjugar las dos cosas, de hacer posible un proyecto religioso utilizando la política y de encarnar una opción política sirviéndose de una vida religiosa (García Hernán, 2012, 20).
A pesar de su deseo de no ser representado se consiguió un retrato suyo post mortem a partir de la mascarilla mortuoria, el retrato  fue pintado por Alonso Sánchez Coello, pintor de cámara de Felipe II, representación  que se considera el modelo que todos tomarían de referencia después. Para realizar este retrato Alonso Sánchez utilizó además de la mascarilla la descripción que de él hizo el padre Ribadeneira en la Vida de San Ignacio. Este retrato parece que despareció en la quema de conventos de Madrid de 1931, pero existen grabados procedentes de dibujos de Sánchez Alonso como el conservado en la BNE (noticia conocida por la amabilidad de Francisco Juez) a disposición del público en la Biblioteca Digital Hispánica: http://bdh-rd.bne.es/viewer.vm?id=0000032128 . La segunda edición y las siguientes de la vida del santo de Ribadeneira  contienen también un grabado de san Ignacio.
Anverso medalla. San Ignacio

Esta imagen que hemos comentado de san Ignacio es la que se representa en las medallas, la efigie de su rostro consumido por las penalidades y que tal vez por ello es la que la gente conserva, admira y  venera por su humanidad que emana poder carismático y sanador.

Aunque los jesuitas son conocidos por su labor en la educación y su labor misional, cuyo ejemplo señero es Francisco Javier compañero de Ignacio que vemos en la medalla, también se interesaron por descubrir los secretos de la naturaleza o la vida de los santos, temas en relación a los intereses que desarrollamos en este blog sobre hagiografía y otras relativas a magia, saberes ocultos, botánica, mineralogía, etc. Ejemplo de esto son Martín del Río, Hernando Castrillo, Gaspar Schott, Juan Eusebio Nieremberg y Bernard Caesius, entre otros. También son reconocidos los jesuitas por el estudio de la hagiografía a través de los bolandistas y la publicación de las Acta Sanctorum en la que se recopila todos los datos posibles de los santos católicos sometiéndolos a un examen crítico que trata de distinguir lo legendario de lo histórico.  Siempre en esa difícil tesitura entre la verdad y la fantasía, lo real y lo imaginado, lo práctico y lo espiritual.
He visto recientemente que se está promocionando el Camino Ignaciano, que es el que recorrió Ignacio de Loyola en 1522 a pie desde su casa natal en Loiola hasta Manresa y Montserrat cuando sintió la llamada religiosa. Una bonita ruta que busca peregrinos.
Reverso de la medalla san Francisco Javier

Bibliografía
La Bibliotheca mágica, Madrid: Universidad Complutense, 2007
García Hernán, E., "Ignacio de Loyola, el mediador. Dos conferencias de Enrique García Hernán" en Revista de la Fundación Juan March, noviembre 2012, nº 415, 19-20. En Internet: http://recursos.march.es/web/prensa/boletines/pdf/2012/n-415-noviembre-2012.pdf
Muñoz Navarro, Ginés M., El agua de san Ignacio, México, 1956
Ribadeneira, P. de, Obras escogidas de Pedro de Rivadeneira, Madrid: BAE, 1952, vol. LX
Santos sanadores, Barcelona: Ciba Sociedad Anónima de productos Químicos, 1948
En Internet: https://elhistoriadores.wordpress.com/2016/04/27/el-soldado-espanol-ligon-y-mujeriego-que-acabo-fundando-una-orden-religiosa/

martes, 29 de septiembre de 2015

EL CULTO A LOS ÁNGELES: LOS ARCÁNGELES

Los tres arcángeles conocidos son Miguel, Gabriel y Rafael. Miguel es el príncipe de la milicia angélica y vencedor del diablo, se le representa pesando almas y pisando al diablo. Gabriel es al arcángel de la llamada, el mensajero de Dios, suele llevar un bastón o cetro o una rama de olivo. Y Rafael es el acompañante de Tobías al que ayuda en su viaje y le proporciona el pez con el que conseguirá sus objetivos, por ello suele representarse junto a Tobías que porta el pez.
San Rafael. catedral de Burgos
San Rafael. Catedral de Burgos

Los arcángeles son venerados por los cristianos, tanto católicos como ortodoxos, coptos e incluso protestantes; también los judíos en el Antiguo Testamento (Dn 10, 13 y Ap 12, 7) y los musulmanes en el Corán dan especial importancia a estos ángeles (arcángeles querubines 4:172, Gabriel 2:97 y 98 y Mikael 2:98). Aunque son los católicos los únicos que veneran entre los arcángeles a Rafael, ya comentamos que en el canon hebreo no está el libro de Tobías. Ver en Internet:
 http://calarc.blogspot.com.es/2013/03/la-curacion-con-las-visceras-del-pez-el.html.
En los iconos bizantinos el testimonio de la presencia angélica es un palio rojo sobre el altar y en el esquema del iconostasio de las iglesias ortodoxas aparecen solamente Gabriel y Miguel, Por otro lado para los musulmanes el arcángel Gabriel es el encargado de trasmitir la palabra de Dios a Muhammad.
En la religiosidad católica el culto a los arcángeles es muy antiguo, aunque en realidad no existen reliquias auténticas de ellos porque son seres espirituales, pero sí se les dedicaban iglesias debido principalmente a sus apariciones, para Jacobo de la Vorágine hay muchas apariciones de san Miguel: la primera fue en el monte Gargano en el 492; la segunda en el 710 al obispo de Avranches, san Auberto, fundador del Mont- Saint-Michel;  la tercera aparición ocurrió en Roma en tiempos del papa Gregorio que dio el nombre al Castel Sant´Angelo; y cerca de Constantinopla un templo dedicado a san Miguel y denominado Michalion sustituye a un templo precristiano.
Divesas imágenes de San Miguel. Museo de la Ciudad de Valencia
Museo de la Ciudad de Valencia.
Diversas imágenes de San Miguel

El único arcángel que recibió culto expreso antes del siglo IX  fue san Miguel. Se le dedicaron iglesias desde el siglo V en Oriente y en Italia, en Occidente su fiesta más importante es el 29 de septiembre que se celebraba en la basílica de la Vía Salaria de Roma y la del 8 de mayo es la fiesta que corresponde a la aparición en el monte Gargano. La primera fiesta aparece en el sacramentario leoniano del siglo VI el día 30 de septiembre y en otro sacramentarios el 29 de septiembre.
Para Carmen Rodríguez el culto a san Miguel en España no es anterior al 711, en el calendario mozárabe aparece la fiesta del 29 de septiembre “Dedicatio sancti Michaeli arcangeli”. Pero Caro Baroja afirma que a partir de la aparición en el Monte Gargano es objeto de culto en montañas y alturas, así como en fuentes y cuevas. En la banda norte de España hay noticias de santuarios muy antiguos bajo su advocación: san Miguel de Pedroso (Burgos) 759, san Miguel de la Escalada (León) 913 de estilo mozárabe y san Miguel de Lillo cerca de Oviedo de tiempos de Ramiro I. Los reyes de Navarra tuvieron como suyo el santuario de Aralar consagrado en el 1074 en el lugar de uno anterior. San Miguel es intercesor en leyendas de lucha contra el demonio y de eremitas penitentes españoles como en san Miguel de Aralar donde se pone en evidencia la asociación  de Miguel con estos casos de tentaciones diabólicas. Ver en Internet: http://calarc.blogspot.com.es/2013/01/la-tentacion-del-eremita.html. El  culto de san Miguel que se establece en Cataluña a partir del siglo VIII por los carolingios proviene de Francia, pero no será hasta el siglo X-XI cuando se produzca la primera gran época de devoción arcangélica. Para Moreau-Rey la devoción arcangélica  penetra en Cataluña a través de la influencia cluniaciense, así  llegará  a Campodrón unido a Moissac y a Ripoll unido a San Victor de Marsella,  pero el centro de irradiación posiblemente sea san Miguel de Cuixá (879).Ver en Internet también: http://algunsgoigs.blogspot.com.es/2016/02/poema-sant-miquel-castello-den-bas-la.html
El ángel de la Anunciación es Gabriel que en el relato de san Lucas dice: ”Alégrate, llena de gracia, el Señor es contigo”, palabras para María para anunciarle el tiempo de la salvación. El arte sacro está plagado de anunciaciones en la pintura y la escultura, especialmente en relieve, se representa a María orando y el ángel en pie se le acerca junto a una vara de azucenas. También se le aparece a Zacarías, el padre de Juan Bautista cuando está en el templo. Podemos decir que en el cristianismo popular Gabriel es menos popular que san Miguel, pero es muy representado en el arte por su asociación a un momento importante de la vida de Jesús y María, por ello también es representado en los gozos de María.
Anunciación. Parroquia de san Benito, Salamanca
Anunciación: Parroquia de san Benito. Salamanca. 
Foto propia.

Finalmente San Rafael, el ángel de Tobías que cura y ayuda en el camino. Al igual que Gabriel, es muy representado pictóricamente y también se le reconoce por ser patrono de Córdoba, ciudad que lo venera, allí muchos hombres llevan su nombre y es el ángel guardián de la ciudad, cuya fiesta se celebra el 24 de octubre. Protector de la Orden de san Juan de Dios y de peregrinos, viajeros y caminantes.
Imagen de san Rafael. Córdoba
Imagen de san Rafael en Córdoba

En la España actual solo quedan dos santuarios regionales dedicados a San Miguel: uno es el de San Miguel de Aralar, en Navarra, y el otro está cerca de Valencia, San Miguel de Liria (Christian, 1981).

Bibliografía
Caro Baroja, Julio, Ritos y mitos equívocos, Madrid: Istmo, 1974
Moreu-Rey, H., "La dévotion a saint Michel dans les pays Catalans" en Baudot, Marcel (dir.), Millénaire monastique de Mont Saint-Michel, tomo III Culte de Saint Michel et pèlerinages au Mont. Paris, 1971
Christian, William, Apparitions in Late Medieval and Renaissance Spain, Princeton University Press, 1981
Martens, Mina y otros, Saint Michel et sa symbolique, Brussels, 1979

martes, 21 de julio de 2015

LAS CRUCES COMO OBJETOS PROTECTORES

La cruz es un símbolo universal y anterior al cristianismo, usado por muchas antiguas culturas desde la prehistoria. El cristianismo como sabemos tomó este símbolo que identifica a los cristianos por el sacrificio de Jesús en la cruz.

El mundo cristiano ha utilizado la cruz oficialmente desde la época de Constantino, de hecho la madre del emperador santa Elena ha pasado a la historia como la persona que encontró los restos de la cruz en la que murió Jesucristo. Y su hijo Constantino tuvo una visión en la que se decía "con este signo vencerás". Pero a la cruz no sólo se la venera, sino que se la adora en los oficios del Viernes Santo de la Semana Santa: "Ecce lignum Crucis/ in quo salus mundi pependit/ Venite adoremus." También desde muy antiguo forma parte del altar.  Los cristianos a lo largo de la historia han dado culto a la cruz y al crucifijo, en el Medievo la cruz es un emblema de la victoria de Cristo y un objeto mágico (Duby, 1988: 151). Los encolpia eran relicarios en forma de cruz que traían los peregrinos con reliquias de los lugares santos, y fueron usados durante la Edad Media.
Encolpia bizantinos de bronce. MAN
Foto propiedad de la autora

Podemos apreciar la presencia de la cruz en los lugares sagrados, así es el caso de las iglesias con cruces tanto en el interior como en el exterior de sus muros, en los tímpanos y también es el caso de los camposantos donde aparecen las más antiguas cruces grabadas en las losas sepulcrales (Castelao, 1975); otra manera especial de sacralizar el terreno es a través de los Vía Crucis, en la subida a ciertos santuarios  y montes. Pero igualmente hay lugares no santos que es necesario santificar o proteger: Castelao comenta que los caminos que llevan a Santiago fueron orillados con los cruceros.
Fuente de Valporquero de Torío
Fuente. Sierra de Ancares

En las fuentes milagrosas también se colocaban cruces así como en las encrucijadas, en la decoración en piedra de las puertas y en  los portalones o cruces exentas sobre la propia puerta; igualmente la vida humana, los campos y los animales son protegidos por la cruz.
Crucero en el Camino de Santiago.
Foto propiedad de la autora
 Las monedas han sido otros objetos santificados por la cruz incluso por los iconoclastas, a lo largo de la edad Media todos los reinos cristianos ha grabado una cruz en sus monedas.
Panel con representación de monedas medievales.
Casa de la Moneda. Madrid

Pero tal vez lo más llamativo con respecto a las cruces sea la idea de que sirven y se utilizan en un sentido similar o igual que un amuleto, el Dictionnaire d´archéologie chrétienne et liturgie considera amuletos ciertas medallas devocionales y entre estas abundan en los primeros siglos las grabadas con cruces y el monograma de Cristo o crismón. Algunas órdenes religiosas han sido especialmente proclives a la veneración de la cruz y han creado pequeñas cruces para ser portadas por las personas con diferentes propósitos, los benedictinos por ejemplo elaboran una cruz con un conjuro para alejar el mal y los eremitas de Montserrat fabricaban cruces en madera de boj en las que grababan los instrumentos de la Pasión, tal vez por influencia franciscana, ya que en un determinado momento los franciscanos extendieron por el Mediterráneo el culto a la Pasión de Cristo.
 
Por otro lado la cruz patriarcal con las reliquias de la Vera Cruz han gozado de singular aprecio entre los creyentes, en España tenemos diferentes ejemplos como el Lignum Crucis de Ejea de los Caballeros, o el del monasterio de Carboeiro que ahora está en Santiago, el relicario de la Vera Cruz de la catedral de Astorga y el relicario de Riells de Fay actualmente en el museo de Barcelona. Pero la más popular es la Cruz de Caravaca, de la que se crearon pequeñas réplicas en metal utilizadas para salvaguardar la casa y la vida en las tormentas y en otras ocasiones de peligro o contra ciertos males, en una cara se representa a Jesucristo y en la otra a la Inmaculada, a veces a los pies de la cruz hay una calavera y a los lados dos ángeles que la sujetan.

Anverso cruz de Caravaca.
Foto propia
Otras ejemplares venerados en iglesias urbanas que podemos nombrar por su valor milagroso y popular son la Cruz de la Victoria de Oviedo y los crucifijos que representan al Cristo de Burgos. La cruz de la Victoria la regaló Alfonso III a San Salvador de Oviedo en el año 908, el interior está formado por dos piezas de madera que contenían fragmentos del lignum crucis. El Cristo de Burgos fue una imagen cuyo culto propagaron los agustinos en esa ciudad, las llamadas crucetas del Cristo de Burgos han sido muy usadas en joyería popular ensartadas en collares, brazaleras, etc.
Cruces de madera, cruces de bronce, plata, oro y marfil para ser llevadas encima o para poner en la puerta de las casas o en el cabecero de la cama como se hacia tradicionalmente. Cruces y crucifijos para los altares, para ser especialmente venerados. Cruces de piedra para los caminos para cristianizar lugares siempre venerados.
Cruces en el dintel de puerta y ventana en Quecedo (Burgos).
Foto de Ester Vela


Bibliografía
Castelao, Alfonso R., As cruces de pedra na Galiza, Madrid, Akal, 1975
Hildburgh, W.L., Caravaca crosses and their uses as amulets in Spain, Folklore, vol. LI, 1940, 241-258
Leclercq, H., Dictionnaire d´archéologie chrétienne et liturgie, Amulettes, París, 1907,  pp. 1874-1800
https://www.facebook.com/446226215556627/photos/a.483418591837389.1073741829.446226215556627/518755654970349/?type=3

lunes, 22 de junio de 2015

EL DRAGÓN EN EL MUNDO OCCIDENTAL

El dragón es un animal simbólico que aparece en diferentes expresiones artísticas desde época prehistórica según veremos después. Se habla del dragón: 1) en distintos tipos de literatura como la Biblia, la literatura hagiográfica, los cuentos y leyendas, así como en los bestiarios medievales.  2) El dragón también es protagonista de la iconografía civil y religiosa, bien en relieves, esculturas, así como pinturas, dibujos y grabados, como acompañante de narraciones o formando parte de una composición narrativa figurativa. 3) El dragón forma parte de las procesiones festivo religiosas europeas como el Corpus u otras fiestas del santoral. Es por eso que el dragón es una figura simbólica difícil de condensar.
Hay temas que están relacionados por medio de estas tres expresiones artísticas, es decir literatura, iconografía y festividades se vinculan y suelen enlazarse a través de la vida de un santo. Santa Marta puede ser el ejemplo señero pues su vida es narrada en la Leyenda dorada donde aparece la viñeta del episodio con el dragón, además este dragón sale en la procesión de la santa de Tarascón en la Provenza. ¿Es la literatura el sistema que vehicula estas expresiones? Puede ser que leyendas y mitos den origen a representaciones plásticas y tradiciones rituales.
Narraciones hagiográficas.-
Además de santa Marta hay diferentes santos que vencieron al dragón, en la Edad Media cada Iglesia tuvo su tarasca o dragón sumiso y encadenado, el cual iba en las procesiones, según Más y Prat (citado por Garrido Atienza, 1990:79). Pero aquí solo vamos a referirnos a las leyendas más conocidas, narradas en la Leyenda dorada y en cuyas viñetas aparece el santo frente a un dragón: San Silvestre 31 de diciembre, san Amando 6 de febrero, san Jorge 23 de abril, san Felipe apóstol 11 de mayo, santa Marta 29 de julio. Por otro lado el arcángel san Miguel cuya festividad se celebra el 29 de septiembre también es reconocido por alancear un demonio que suele tener aspecto de dragón.
San Amando y el dragón.
Wikipedia

 ¿Qué dicen las leyendas de esos dragones? Son dragones amenazantes que ponen en peligro la vida de la comunidad: san Silvestre invoca al Espíritu Santo y consigue amordazar al dragón que identifica con Satanás en su cueva; san Amando obliga esconderse a una serpiente al hacer la señal de la cruz; san Jorge mata al dragón que vivía en un lago en la ciudad de Silca y que se alimentaba de ovejas y a falta de estas se comía a la gente, pero cuando llega san Jorge salva a una doncella y encadena al dragón con el objetivo de que toda la ciudad se bautice, entonces mata al dragón; san Felipe apóstol, también aparece al lado de un dragón porque según la leyenda cuando predicaba en Escytia le obligaron a hacer sacrificios ante una estatua de Marte, cuando apareció un dragón que empezó a matar a los paganos que asediaban al santo y este consigue así obligarlos a que quiten la estatua y pongan una cruz, también consigue que el monstruo se vaya al desierto; santa Marta es la hermana de Lázaro que según la tradición viaja con un grupo de cristianos hasta Marsella para luego trasladarse a Aix, allí en un bosque cercano entre Arlés y Aviñón había un dragón que a veces salía de la selva y se sumergía en el río y volcaba las embarcaciones, dicen que era hijo de Leviatán y que había venido por el mar hasta el Ródano, Marta consigue amansar esta fiera con ayuda de la cruz y agua bendita para después llevarla atada fuera del bosque donde los hombres del pueblo la matan. El lugar donde se escondía este dragón es llamado Tarascón y allí se retiraron Marta y sus acompañantes.
Estos relatos identifican los demonios bíblicos con el dragón, y en ellos los santos se caracterizan por dominar a los dragones, idea basada tal vez en el mandato de Cristo a sus discípulos que dijo "expulsaréis los demonios", y en otros pasajes tanto del Nuevo como del Antiguo Testamento así: Tobías y el diablo Ashmodeo, Daniel y el dragón de Babilonia, la bestia de siete cabezas del Apocalipsis, etc. Aunque los dragones se identifican con el mal son obedientes con los santos y les sirven a estos para obligar a los paganos a rendirse ante el cristianismo. La historia de san Jorge es quizá la que más claramente proviene de fuentes folklóricas, hay cuentos en la colección de Afanásiev semejantes a la historia de San Jorge, la de santa Marta igualmente resulta de la cristianización de leyendas de tradición oral. 
Rejería colegio de Pilar.
Madrid
Los bestiarios consideran que el dragón es la mayor de las serpientes, mata con su cola, vive en las cuevas y a veces va al mar; también le identifican con el demonio. Pero el dragón no tiene siempre carácter negativo, de hecho en las culturas orientales es emblema de la Vida y del Verbo divino en el budismo y el lamaísmo. En la Edad Media la heráldica nobiliaria asocia el dragón con la Vigilancia y el Ardor. Se conocen leyendas en las que la sangre de los buenos dragones era apreciada como remedio contra heridas y otros males, esta sangre se volvía resinosa y de color púrpura oscuro en las arenas del desierto en Etiopía, era la llamada sangre de drago. No es hasta el siglo XVII cuando se averigua la procedencia de esta resina por el médico Nicolás Monardes quien asegura que tiene origen vegetal, esto es proviene de frutos desecados de distintas palmeras (Calamus draco) de las riberas del golfo Pérsico y de la cuenca del mar Eritreo, del Indostán y de Indochina. "La sangre de drago la produce generalmente el Dracoema draco de las Canarias y la Azores, y el Pterocarpus draco, de las Indias Occidentales y de América del Sur, conocidos por Nicolás Monardes" (Charbonneau-Lassay, 1997:392). Los libros que hablan de la piedra bezohar suponen que algunas  de estas piedras están en la cabeza del dragón y se llaman draconitas (Carmen Baroja, 1945:18).
Drago milenario de Tenerife.

Novedosos estudios sobre la dispersión de una figura universal como es el dragón han puesto de manifiesto su origen prehistórico, Julien d´Huy ha investigado sobre las historias de dragones en 23 regiones alrededor del mundo centrándose en 69 variables argumentales y con los resultados utilizó otra base de datos en 9 áreas y argumentos usados por Robert Blust (2000) para definir dragón. Trabajó con métodos filogenéticos y estadísticos, presentó árboles y tablas donde muestra cómo ha evolucionado el motivo y ha demostrado la existencia de un nexo entre múltiples representaciones del motivo del dragón cuyo desarrollo sigue alguna de las grandes migraciones del planeta. Así llega a la conclusión de que muchas de las figuras de dragones actuales provienen de la misma fuente. El primer motivo proviene de África, se enriquece en el Lejano Oriente, y una versión llega a Australia y otras a América. Después pasa al Mediterráneo que pudo conectarse con la expansión Indo-europea (2015).
Iconografía del dragón.-
El dragón en el mundo cristiano es utilizado por el románico y el gótico, así como por otros estilos posteriores a lo largo de los siglos. En el románico lo vemos en los capiteles historiados, arquivoltas, cimacios de iglesias y monasterios a veces en solitario, pero generalmente con  caballeros o con personajes bíblicos que lo alancean. Esta figura claramente draconiana ha sufrido una evolución hasta llegar a estar totalmente formado. Aparece en forma serpentiforme en los entrelazos figurados que decoran manuscritos en el sur de Francia, Italia y las Islas Británicas, pero sobre todo es en Irlanda e Inglaterra donde se utilizan figuras realmente dragoniformes como por ejemplo en los entrelazos del Libro de Kells. Durante la época carolingia los dragones toman forma en muchos manuscritos iluminados de carácter religioso y se inserta en escenas hagiográficas, míticas o bíblicas. Mientras en en el sudeste de Europa y Bizancio no hace su aparición hasta el siglo XII, de hecho en Bizancio se pintaba el dragón serpiente. En España pasa algo parecido no es hasta el siglo XII que se representa el dragón románico, porque en los Beatos los dragones tienen forma serpentiforme. El Camino de Santiago es un recorrido artístico en el que podemos visualizar muchos tipos de dragones: sillería del coro de santa María la Real de Nájera con dragones esculpidos en madera de nogal, capitel con san Miguel al estilo de san Jorge del Hospital de san Juan de Acre, etc. Un caso poco conocido es el de los dragones pintados en la bóveda de la iglesia de la Asunción del siglo XV en Robledo de Chavela, y que fueron descubiertos hace tres años, en Internet: 
http://ccaa.elpais.com/ccaa/2013/08/08/madrid/1375976884_524990.html
Igualmente la bóveda del ábside de la concatedral de Santa María de Cáceres tiene pintados dragones dispuestos sobre los nervios y coloreados, son los enemigos de María y de san Miguel. El uso de dragones en estas bóvedas, así como en otros lugares como la rejería que cierra lugares o en el dintel de una puerta de entrada nos hace pensar que en ese caso los dragones son seres protectores.
La leyenda de la tarasca que sumía en el terror a toda la ribera del Ródano es la de santa Marta cuya procesión tiene lugar el día de la santa cuando se celebra su triunfo. Aunque es una fiesta originaria de Tarascón existen otras festividades en toda la Provenza y la zona del Ródano donde aparecen monstruos parecidos a la tarasca alrededor de tradiciones orales sobre el dragón y sus compadres: san Andrés en Aix-en-Provence, san Victor en  Marsella, san Armentario en Draguignan y santa Radegunda en Poitiers.
Tarasca de la procesión del Corpus de Granada de 2015.

En el siglo XIII se crea la fiesta del Corpus que poco a poco va siendo celebrada con multitud de procesiones en las que se exalta al Santísimo Sacramento. Julio Caro Baroja piensa que la introducción del Corpus en la península tiene lugar a principios del siglo XIV por influjo de Provenza, pero realmente no alcanza éxito hasta la Contrarreforma en el siglo XVII, es una fiesta eminentemente Barroca que se desarrolla en las ciudades: Madrid, Valencia, Granada, Segovia, Málaga, Toledo, Tarragona y otras ciudades levantinas. La tarasca figura un animal que tiene vida propia porque mueve la cabeza y da golpes también con la cola o sea que establece una agresión ritual con el público y a veces echa fuego por las fauces. En la Segovia del siglo XVII se trataba de un cortejo que solía llevar en primera línea la tarasca a la que sobreponía la tarasquilla, acompañada de ocho gigantes y dos enanos que servían de guías. Los monstruos danzantes se componían de gitano, gitana, negro, negra, español y española, turco y turca y enano y enana. Estos danzantes eran propios de todas las procesiones. Salían de la catedral y estos mimos precedían a la custodia. Era un espectáculo complejo que se componía del aparato eclesiástico y los danzantes.

La participación del dragón en estas fiestas religiosas pone el colofón a una figura tan arquetípica, antigua y cargada de elementos en una mezcolanza variadísima, en ellas vemos resumida su simbología y su carácter ambivalente.

Bibliografía.-
Baroja, Carmen, Catálogo de la colección de amuletos. Trabajos y materiales del Museo del Pueblo Español. Madrid, 1945
Bestiario medieval. Edición a cargo de Ignacio Malaxeverría, Madrid, Siruela: 1986
Charbonneau-Lassay, L., El Bestiario de Cristo, vol. I, Palma de Mallorca, 1997
d´Huy, J., Statistical methods for studying mithology. Three Peer reviewed Papers and short History of the Dragon motif. -The Retrospective Methods Network Newsletter. Winter 2014-2015, 9, 125-127
Flecniakoska, J.L., Las fiestas del Corpus en Segovia (1594-1636), Estudios segovianos, Tomo VIII, 1956, 65p.
Garrido Atienza, M., Antiguallas granadinas. Las fiestas del Corpus. Estudio preliminar por José Antonio González Alcantud, Granada, 1990
Les geants processionnels en Europe. Colloque du 20 au 22 Aoù 1981. ATH, 1983
Vorágine, Santiago de la, La leyenda dorada, I, Madrid, Alianza Editorial, 1982
En Internet: http://disinfo.com/2015/08/clavis-artis-skin-dragon/

viernes, 15 de mayo de 2015

USOS PROFILÁCTICOS Y MÁGICOS DE LAS PLANTAS

El mundo vegetal al igual o más que los otros reinos de la naturaleza ha sido cargado de virtudes especiales. Las plantas han servido para curar así como para hacer enfermar o matar personas y animales. Este poder que reside en ellas y especialmente en algunas hierbas ha sido conocido y transmitido de generación en generación a lo largo de la historia, las personas que conocían estos poderes eran  por ello valoradas, aunque en general los habitantes del mundo rural que han estado en contacto directo con la naturaleza sabían mucho más de plantas que los habitantes de las ciudades.
Por tanto podemos hablar de unos saberes tradicionales asociados al mundo del calendario agrícola y festivo. La vegetación nace y muere a lo largo del año y los labradores asociaban sus fiestas en muchos casos a este ciclo, mayo y junio por tanto son meses de festividades y de esplendor  en los campos que nos recuerdan creencias relacionadas con estas fechas y con los poderes de las plantas en estos momentos. Por eso mayo y junio compiten entre ellos. 
La magia natural.-
Mayo.- Durante el mes de mayo son numerosas las fiestas donde las flores, los árboles y las hierbas son cortadas y utilizadas en diferentes ritos y con diferentes fines: los matrimonios de mayas y mayos, las enramadas de tipo amoroso, las cruces de mayo, los mayos plantados en la plaza del pueblo, etc. El primero de mayo antiguamente en los pueblos se plantaba el mayo, un árbol o palo adornado como mejor se podía. Para la santa Cruz de Mayo se bendicen ramas de espino albar florecido que se usan contra el rayo o cruces hechas con ramos de laurel. De mayo todo es bueno hasta el rocío: Enrique de Villena escribió un tratado sobre fascinología en 1411, era buen conocedor de la magia  simpática y cuenta que: “A los moros lavan los rostros con el agua de almanchizén, que es rocío de mayo…” Citado por Menéndez Pelayo.
San Juan.- Pero es la noche y la mañana de san Juan (el 24 de junio) cuando se supone en las plantas unas virtudes excepcionales. Las enramadas son señal de fiesta, así los jóvenes adornan con ramos de fresno y de otros árboles (espino, chopo blanco, haya o encina) las puertas o las jambas de las casas de las mozas y se echan yerbas como claveles, espadaña, hinojo y margaritas en los umbrales. Se ha pensado secularmente que las plantas y hierbas recogidas por san Juan tenían propiedades profilácticas y medicinales, además de efectos amorosos. Las enramadas se consideran virtuosas contra los rayos y a veces algunas en particular contra ciertas enfermedades.
Para Caro Baroja hay una serie de hierbas que se recogen especialmente para san Juan como: la verbena que se recogía en los campos de Madrid y de otros lugares tanto por la noche como la mañana de san Juan; el helecho se cree que florece y grana en la noche de san Juan y que las brujas lo recogen para sus hechizos, esta práctica es nombrada en algunas obras literarias como La Celestina; y el trébol igualmente se recoge en san Juan según se canta, y el de cuatro hojas es el que se considera especial. Después nombra la albahaca, la valeriana y la ruda. La ruda es buena contra las brujas y la ponen en la cuna de los niños y también tiene propiedades medicinales. La valeriana  tiene propiedades mágicas para conseguir estrechar las relaciones especialmente amorosas y finalmente la albahaca que también es hierba de san Juan con propiedades mágicas. Estas plantas se vendían antiguamente en las “verbenas” como la de san Juan, y por ello verbena sirve tanto para nombrar la planta como para el regocijo público con motivo de la fiesta primaveral o estival (Caro Baroja, 1989: 126).
Con carácter protector y en demanda de fertilidad las plantas se utilizan bien esculpidas en piedra en dinteles y arcos o bien en ramas colgantes en los muros y balcones, como ocurre con el muérdago, la ruda, el arto o rusco y las flores de cardo (Pirineo español). En torno a las creencias y mitos comenta Violant i Simorra de la flor del cardo dorado, Carlina acaulis, que cuando está abierta recuerda la figura del sol por ello es un repelente de brujas, y se cuelga en la puerta la mañana de san Juan antes de la salida del sol. Igualmente las ramas de laurel (bendecido el Domingo de Ramos), olivo y rosal silvestre ahuyentan brujas y preservan de las tormentas.
Venta de plantas mercado de Valencia. Navidad 2014
Puesto de venta de plantas. Valencia
Foto propia

Las brujas y su mundo.-
En paralelo a las mentalidades rurales tradicionales, pero en relación, se halla el mundo de las brujas que utilizan las plantas con distintos fines como el curanderismo y en otros casos la hechicería. Caro Baroja habla de Las brujas y su mundo, un importante trabajo sobre la magia y el concepto de bruja a través del tiempo, relacionado especialmente con España. Otros autores nombran los llamados “herbolarios diabólicos”, libros que explican las posibilidades y usos de plantas de la familia de las solanáceas como el estramonio, la mandrágora, el beleño y la belladona. Plantas que alteran la conciencia y que en ciertas dosis pueden causar la muerte.
En la Biblioteca Histórica de la Universidad Complutense de Madrid hay una buena colección de libros antiguos y entre ellos algunos dedicados a plantas de los que citaremos un puñado: el Ramillete de plantas de Esteban de Villa, benedictino burgalés y farmacéutico que habla de la importancia de las estrellas en el mundo vegetal; otro libro es el Ortus sanitatis impreso en Estrasburgo en 1517, es un libro de historia natural que dedica mucho espacio a las plantas medicinales y entre ellas la mandrágora de efectos alucinógenos; y otro dedicado a la mandrágora de Bernardo Robredo Dilucidación nueva y estudiosa de las singulares virtudes y maravillosos efectos de la mandrágora, planta utilizada en la magia amorosa; Juan Cornejo escribió El modo y traca de hazer oro potable vegetable, del lentisco y sus diferentes cocimientos… en el que da una receta  para hacer el oro potable usando lentisco para curar multitud de enfermedades; Tomás Murillo y Velarde Jurado escribe un Tratado de raras y peregrinas yervas que se han hallado en esta corte y sus maravillosas virtudes donde ofrece un catálogo de supersticiones alrededor de la mandrágora; finalmente nombraremos el Dioscórides de Andrés Laguna el cual dedica un apartado a las plantas alucinógenas utilizadas por brujas (Rey Bueno, 2007:149-159).
Ortus sanitatis. Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla:UCM
Ortus sanitatis.
Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla. UCM

Existe una delgada raya que separa una magia de otra, es decir la magia natural a veces se confunde con la brujería, así por ejemplo el Marqués de Villena nos ofrece datos de cómo algunas plantas son usadas por ambos tipos de magia: “Por virtud natural usan traer coral e fojas de laurel e raíces de mandrágora…” Citado por Menéndez y Pelayo. Lo cual nos induce a pensar que los usos de ciertas plantas conocidas por todos eran distintos según los conocimientos e intenciones de cada persona.
 Bibliografía
Biarge, Fernando y Ana, Líbranos del mal. Creencias, signos y ritos protectores en la zona pirenaica aragonesa. Huesca, 2000
Caro Baroja, Julio,  La estación del amor, Madrid: ediciones Taurus, 1979
---------Las brujas y su mundo, Madrid: Alianza editorial , 1973
Kieckhefer, Richard, La magia en la Edad Media, Barcelona, 1992
Menéndez y Pelayo, Marcelino, Historia de los heterodoxos españoles, Libro III, Madrid, 1965, vol. I
Morales, Ramón, "Plantas mágicas y brujería", Quercus, 10, 7-8
Rey Bueno, María (comisaria), La bibliotheca mágica, Madrid, UCM.,2007
Violant i Simorra, Ramón, El Pirineo español, Barcelona, 1985 y 1986, Vols. I y II

sábado, 25 de abril de 2015

ORÍGENES DEL ÁRBOL DE JESÉ

Enlazando con el anterior artículo del blog continúo con el tema del árbol. Para rectificar o aclarar un punto sobre el origen de la iconografía del  árbol de Jesé  cuyo primer autor no fue Suger exactamente, pues desde el siglo XI se había usado este modelo iconográfico y hay que recordar que la vidriera de saint Denis es de 1114. Vamos a tratar dos puntos: 1) por un lado ese uso anterior a Suger en el mundo cristiano occidental y 2) por otro constatar que la iconografía del árbol de Jesé no es una creación original de la cristiandad sino que parece provenir de imágenes muy anteriores del arte extremo-oriental: “La disposición original con el árbol que nace de su costado, tal como se afianzó en los siglos XI-XII, tiene un sorprendente parecido con la escena en la que vemos a Brahma sentado sobre una flor de loto que sale del vientre de Visnú, quien se encuentra tendido sobre una serpiente”. Y después del siglo VI se representa el tema en Birmania y Camboya (Baltrusaitis, 1983: 200-201).
El mundo antiguo: Grecia, Roma y las rutas caravaneras
Para entender la recreación en Europa de una iconografía de origen tan lejano tenemos que hacer un pequeño repaso para conocer lo que se conocía y escribía sobre el oriente lejano desde épocas muy antiguas. Porque las relaciones entre Oriente y Occidente nacieron en la Antigüedad y desde entonces el mundo occidental ha tenido una idea de cómo era ese mundo al que se rodeaba de un halo de misterio y de fantasía. La concepción literaria sobre la India nace en Grecia: el primero en escribir sobre India es Herodoto quien da una somera idea de aquellas tierras, más tarde Ctesias como médico real en la corte de Artajerjes de Persia elabora la idea de que la India es un país de maravillas, Alejandro Magno invade la India en el 326 a. C. y cambia la concepción que los occidentales tenían del país, se rodea de científicos que escribieron varias obras, así es el caso de Megástenes que cuenta historias fabulosas, el tratado de Megástenes sobrevive en Diodoro Sículo, Estrabon, Plinio, etc., y su rastro dura muchos siglos. Pero las relaciones entre Oriente y Occidente se dificultan en su ruta por tierra, mientras la ruta por mar al sur de la India crece y el comercio con los romanos  se hacía a través de los árabes (Wittkower, 2006:71-76).
 Las relaciones comerciales suponen igualmente un importante elemento dinamizador, sirios, griegos y judíos viajan hacia Oriente Medio y la India. Ciudades como Batné, Antioquia, Palmira, Petra, etc., son eslabones de una cadena que llevaba hacia la India y más allá. Los griegos llegaron a Asia Central, pero los sirios y los palmirenses desempeñaron también un papel importante en el comercio antiguo como caravaneros que iban desde el Mediterráneo al Golfo Pérsico donde servían de intermediarios de mercancías entre los romanos y los partos. Aunque el cristianismo no penetra en la India el brahmanismo se introduce en Occidente en medios cultivados de Roma y Constantinopla (Boulnois, 1964:116), llegan filósofos indios en las embajadas enviadas al emperador y poco después se conocían los Upaniçad. En los siglos IV y V sirios, griegos o judíos no llegaron aún a China sino que como Alejandro Magno llegaban a la India .
La Edad Media
La Edad Media es heredera de estas fábulas que tenían un origen literario y que pervivieron por medio de autores antiguos como Plinio, Solinus y Marciano Capella, san Isidoro y Rabano Mauro. Wittkower considera que existió también una vía de transmisión pictórica en manuscritos ilustrados de estos mismos autores mencionados y en las ilustraciones de los mapas del mundo o mappa mundi. Otra manera de transmisión sería los manuscritos iluminados árabes como es el caso de la Cosmografía de Qazwini. Pero existen más fuentes de inspiración como el Libro de Alexandre escrito en griego y que fue traducido en la Edad Media
“Desde aproximadamente el siglo XII en adelante, las maravillas penetraron en el campo del arte religioso (Ibid, 85)”. La iconografía románica se impregna de estos monstruos e imágenes fantásticas como en las iglesias cluniacenses que se inspiran en la tradición, que acabamos de ver, lo que Wittkower llama tradición geográfico etnológica y también se inspiran en libros como el Physiologus y en los Bestiarios. Podemos poner el ejemplo de una ilustración medieval que representa un árbol denominado el árbol Perindex o Peridexion que se dice natural de la India y que aparece en el Physiologus. En este hermoso árbol se refugian palomas para salvarse de las dentelladas del dragón que las espera en el suelo, de ello hacen una lectura alegórica:
Manuscrito 3244 Harley de la Biblioteca Británica:
Bestiario Aberdeen con Peridexion
Árbol Perindens en el Oxford Bestiary. Wikimedia
Oxford Bestiary
Árbol Perindens. Wikimedia

Biblioteca de Douai, De natura animalium ms. 711
Durante el siglo XI y todo el XII se desarrolla en Occidente la iconografía del árbol de Jesé. Las primeras representaciones son miniaturas de manuscritos, después pasa a la pintura mural románica, techumbres de madera y la vidriera gótica, relieves románicos y en el arte mueble se hacen frontales de altar, sillerías de coro, tapices, bordados, etc. Existen tres variantes siguiendo a Manzarbeitia: Jesé solo del que crece un árbol con siete ramas, la vara o virga asociada a la figura de María que ocupa casi todo el espacio del tronco, forma de árbol genealógico familiar en el que aparecen familiares y profetas. Antecedentes: candelabro judío de los siete brazos, el árbol de las Siete Artes de Teodulfo de Orleans, representaciones genealógicas de los beatos hispánicos. Otros antecedentes son las representaciones de origen hindú del nacimiento de Brahma, y las del árbol Wak Wak que narran leyendas árabes del siglo X pero su origen se remonta a textos chinos anteriores, conocidos a través de relatos de viajeros occidentales (2009:4).
Árbol de Jesé, siglo XVIII. Museo Arqueológico Nacional
Árbol de Jesé. Siglo XVIII
Foto MAN
Ya comentamos anteriormente la rica tradición de representaciones del árbol de Jesé en España, ahora solo vamos a mencionar las tres versiones del códice rico de las Cántigas de Santa María (El Escorial ms TI, 1,) que para Ana Domínguez Rodríguez responden a un modelo mariológico; el árbol de Jesé del parteluz del Pórtico de la Gloria de Santiago de Compostela; y el retablo de la capilla de santa Ana de la Catedral de Burgos. Aunque es un tema muy estudiado podemos seguir investigando toda esta iconografía del árbol de Jesé en España y en Europa, cuyos orígenes están en el medievo y que ha llegado hasta el siglo XVIII.
Retablo en la capilla de santa Ana de la catedral de Burgos: árbol de Jesé
Árbol de Jesé en la capilla de santa Ana
Catedral de Burgos. Foto propia

Bibliografía
Baltrusaitis, La Edad Media fantástica, Madrid, 1983
Boulnois, L., La ruta de la seda, Barcelona, 1963
Manzarbeitia,  Santiago, “El árbol de Jesé”, Revista digital de iconografía digital, vol. I, nº 2, 2009, 1-8. En Internet: https://www.ucm.es/data/cont/media/www/pag-41515/rdim_2.pdf
Montoya Martínez, J. y Dominguez Rodríguez, A. (coord..), Scriptorium alfonsí: de los libros de astrología a las Cántigas de Santa María, Madrid, 1999
Wittkower, R., La alegoría y la migración de los símbolos, Madrid: ediciones Siruela, 2006